La conducción eficiente es un modo de conducir el vehículo que tiene como objetivo lograr un bajo consumo de carburante a la vez que reducir la contaminación ambiental. A su vez se obtiene un mayor confort en la conducción y una disminución en los riesgos en la carretera.
Esta conducción se rige por una serie de reglas sencillas y eficaces, que tratan de aprovechar las posibilidades que ofrecen los motores de los coches actuales.
Durante años la eficiencia en la conducción ha sido la gran olvidada. En España el transporte quema más del 60% del petróleo que se consume. La relevancia de estas cifras hace plantearse la utilización del automóvil de manera más eficaz.