Con varios pasajeros
De momento, en España, las pruebas piloto realizadas hasta la fecha con vehículos autónomos siempre han contemplado la posibilidad de no llevar un conductor, pero sí varios pasajeros a bordo, porque esa es la mejor manera de matar dos pájaros de un tiro: los algoritmos se educan en un entorno previsible y controlado y los pasajeros pierden el miedo a los vehículos sin conductor. “Son experiencias muy positivas tanto para el aprendizaje de los sistemas de automatización como para ganar la confianza de los usuarios”, asegura Felipe Jiménez. A priori, la aceptación social de una tecnología tan novedosa que no requiere intervención humana es un problema que puede ser lento de resolver. Por eso que los usuarios vayan probando niveles crecientes de automatización ayuda a generar confianza “y el uso en vehículos que hacen recorridos repetitivos es un buen comienzo para probar altos niveles de automatización”, concluye Jiménez.
La próxima muestra de lo que la unión de la automatización y el transporte público pueden conseguir juntos se vivirá en 2026 en Leganés. El fabricante de autobuses Karsan y el Grupo Ruiz se han unido para realizar una prueba piloto pionera testeando un servicio de autobús autónomo a demanda que conectará el Parque Tecnológico de la ciudad con su centro.
“Es una nueva forma de circular porque desaparece el concepto de circuito. Todas las posibles rutas y combinaciones que existen entre esas paradas tienen que ser mapeadas y es el pasajero, a través de una aplicación, quien escoge el trayecto que le interesa, que a lo mejor es de la parada uno a la cinco sin pasar por las demás”, explica Ángel Estrella, director general de Karsan en España.
Esta firma turca de autobuses no es primeriza en automatización, de hecho, sus modelos ya operan en Suecia, Suiza, Finlandia, Alemania, Francia, Países Bajos y Noruega. Según añade Estrella, es en este último país, “donde desarrollamos el proyecto más longevo de autobús autónomo, pues llevamos operando desde mayo del año 2022 sin que hasta ahora haya habido ni el más mínimo incidente”. Los autobuses autónomos ya circulan en varias ciudades europeas sin problemas y sus usuarios recurren a ellos a diario. Porque si la tecnología demuestra ser útil y eficiente, se acaba imponiendo.